Las nuevas tecnologías para impresión textil todavía no han podido desplazar a la tradicional serigrafía, ayudada por sus mejoras. La durabilidad de las impresiones con serigrafía sumada a una importante cantidad de acabados y aplicaciones y la menor agresión al medio ambiente son los motivos que mantienen a esta técnica en un lugar de importancia, a pesar de las nuevas tecnologías y sus innegables cualidades. Una ventaja sobre otras técnicas es la cantidad de industrias vinculadas con ese método y la variedad de aplicaciones que ofrece. Automotrices, electrónicas, alimentarias, tecnológicas y moda son algunas de las áreas alcanzadas por las aplicaciones serigráficas. En el área textil, la sublimación con sus mejoras de calidad y la popularidad que ha ido alcanzando, además de la aparición de otras tecnologías de impresión digital, han desarrollado una competencia con la serigrafía. Eso no implicaría su desaparición, sino un impulso hacia la innovación por parte de quienes se dedican a esta técnica, que mantiene sus ventajas en cuanto a calidad de la imagen, fidelidad de color, textura, efectos de brillo, relieve o aplicaciones decorativas. El aumento de exigencias en cuanto a creatividad, tiempos y el compromiso con el medio ambiente serán las que marcarán el nuevo espacio de las técnicas. En este último tema, la conciencia ecológica de los consumidores más jóvenes ha sido la que impulsó el giro de la serigrafía hacia opciones verdes, que se dio con la aparición de tintas menos agresivas con base agua. Además, los nuevos equipos han logrado aumentar el ahorro de agua y energía durante la producción y el mantenimiento y los contaminantes y desechos se han reducido. 18 de enero de 2017 – ep