UNA TÉCNICA SATISFACTORIA
Si bien no es excesivamente simple, la serigrafía permite que cualquiera se acerque al mundo...
Comentarios desactivados en UNA TÉCNICA SATISFACTORIAA la hora de iluminar un local comercial habrá que tener en cuenta que hay diferentes tipos de luz, que se podrán diferenciar por el tipo de lámpara que la genera. No hacerlo podría generar errores tanto como si se confundieran los colores con los que se pintará el local. Por eso, para comenzar habrá que tener en cuenta que los tipos de luz más habituales que se emplean en el interior comercial son: la incandescente no halógena (bombilla tradicional); la incandescente halógena; fluorescente; halogenuros metálicos; led y fibra óptica. La elección dependerá del caso concreto a iluminar y de la mayor o menor importancia que se le dará al tema, teniendo en cuenta que no existe un modelo de iluminación básico o establecido para aplicar. Esto se da por los motivos en torno de los que girará la elección, como consumo, rendimiento, si es luz puntual o de ambiente, las horas que estará encendida, que producto se va a iluminar, cuantas veces se encenderá o apagará, el entorno, el público y otras variantes. En función de la disposición o uso que se le dé a una misma lámpara tendrá diferentes formas de iluminar. Con una lámpara de bajo consumo, ubicada en una luminaria con un reflector que concentre mucho el halo de luz conseguimos una iluminación puntual, sin ese elemento el ángulo de apertura será mayor y la luz funcionará como ambiental o escondida en un foseado generará luz indirecta. Elegida la fuente o tipo de luz y el modo de iluminar, se definirán los últimos detalles. Para un mismo tipo de lamparita, en ocasiones, se podrá decidir entre diferentes soportes o posibilidades de colocación, así como distintas potencias, en función del volumen a iluminar. Otros elementos a definir también podrían ser reflectores para modificar el halo de luz, temperaturas de color y los transformadores necesarios para la mayoría de lámparas, que aunque queden ocultos, serán fundamentales para un correcto y óptimo funcionamiento de la instalación. La iluminación de espacios comerciales es una de las implicancias técnicas de un proyecto que requerirá de mayor experiencia y cuidado profesional. Un buen diseño de la iluminación comercial puede restar importancia a ciertas deficiencias de un mal proyecto. Pero, por el contrario, una mala planificación de la iluminación puede “arruinar” un espacio comercial completo. 22/09/2015 ep