Desde el diseño para la vía pública es posible llegar a todos los públicos con materiales que no perjudiquen la ecología.

“Podemos crear en nuestro país una conciencia mejor sobre el cuidado del medio ambiente. Los materiales existen y, si la gente los conoce, puede exigir que se usen. No los quieren usar o los gobiernos no obligan a que se usen, por eso la gente no lo hace”, sentenció Hugo Santarsiero, docente de las Universidades Católica Argentina y del Salvador.
Santarsiero expuso sobre “Eco diseño y la vía pública” en Auditorio José Luis Tesconi de la última edición de Expo Sign & Design Shop, que se realizó en el Centro Costa Salguero de Buenos Aires, a principios de septiembre.
El especialista se refirió a los nuevos materiales en uso, como plásticos, maderas, cartones, etcétera, y a lo vinculado con los diseños en la vía pública aplicado a la sociedad. “Un concepto general de cómo se diseña mal para la vía pública, dejando afuera a un montón de gente”, enfatizó.
Al ejemplificar, el académico se refirió a ”carteles en vidrieras que no se leen, señalética en hospitales ante la cual la gente muy anciana se tiene que agachar para ver una letra muy chica que dice “el que sufre osteoporosis, a la derecha”, y después quedan torcidos y no se podrán enderezar. Son cosas irracionales que no deben existir”.
“Hacen para la vía pública carteles ante los cuales la gente debería quedarse quieta para leer un poema sobre lo que va a hacer un candidato en el futuro si lo votan. Muchas cosas que tienen que ver con el error entre la vía pública y el diseño”, añadió.
Además, consideró que “en el mundo real, cada día se hacen más menciones en idioma inglés para distinguir descuentos y ofertas de temporada, tipos de locales y determinados productos, así se deja afuera a una gran parte de la población que no habla ni sabe leer en inglés”.
Santarsiero explicó que “el diseñador joven diseña en un monitor, él tiene buena vista y está frente al monitor, pero habrá gente de 80 años que lo lea en un sanatorio, y no lo verá. El diseñador no pone una tipografía más grande para que pueda verlo y hace cosas para gente de 20 años. También, muchos de los que hacen esa señalética son arquitectos y los arquitectos no están validados para hacer todo, entienden de tipografía pero eso no es todo. Entonces, se debe buscar un diseñador que los ayude. Se trabaja para unos pocos y no para todos”.
“Como sociedad se debe trabajar para que la gente de mayor edad se incorpore al público y pueda leer los mensajes, eso es inclusión. Lo otro es concientizar sobre los nuevos materiales”, añadió el docente.
Así, Santarsiero se zambulló en la idea de que “en la vía pública se utilicen plásticos biodegradables, madera ecológica, cartones de biomasa. Hay que explicar y concientizar sobre el medio ambiente. A ver si podemos crear en nuestro país una conciencia mejor sobre el cuidado del medio ambiente. Los materiales existen y si la gente los conoce puede exigir que se usen”, enfatizó.

27 de septiembre de 2017 – ep