El diseño y la preparación del material que se utilizará en una gigantografía implica una serie de cuidados que no se deberán dejar de lado para obtener un buen resultado. Muchas veces, las empresas envían a las imprentas artes con características que no son aptas para una impresión; muchos veces el problema esel tamaño del archivo, la fotografía y los colores. Muchas imágenes extraídas de la web, son jpg de 1000 x 900 o menos. Esto serviría para gigantografias muy grandes de 46 pixeles por pulgada pero tendrían que estar muy alejadas del publico, ya que dos metros por uno y medio se podria imprimir a 72 pixeles, pero si estuviera muy cerca del espectador debería tener 120 pixeles. Así, las revistas imprimen a 300 pixeles por pulgada, ya que el lector la tendrá a menos de un metro de sus ojos. Para el diseño, se debería hacer el trabajo creativo a 300 dpi al 10 % del tamaño real que tendrá la gigantografía. Igualmente, la recomendación sería la de no trabajar con imágenes extraídas de internet o con cámaras de celulares o de familiares con resoluciones inferiores a 10 megapixeles, debido a que su resolución es muy baja y mala para las gigantografías. Si no pudiera evitarse, se deberán seleccionar las que estuvieran en mejores condiciones y pasarlas por algún programa especializado, para hacer una prueba de descarte de la Resolución de las imágenes, llevando la imagen al tamaño real, si sufriera una gran alteración, se deberá descartar, porque el retoque no podrá conseguir la calidad necesaria para el trabajo. Otra recomendación, es trabajar en formato CMYK, durante todo el proceso, debido a que el RGB, en los retoques e importaciones de fotos y archivos, podrá hacer variar los colores entre la imagen inicial y la final, afectando la calidad de los resultados. Además, se deberá hacer una prueba de color, ya que cada máquina de impresión tiene un diferente registro de configuración y no son lo mismo que los colores del offset.