Las vallas móviles se han convertido en una alternativa creciente dentro del mercado publicitario gracias a sus virtudes.

Las vallas móviles se han convertido en uno de los medios de publicidad exterior con mayor crecimiento en los últimos años, debido al alto impacto que generan ante el espectador, llevando la marca o mensaje hasta donde está el cliente final.
Es un medio flexible de alto impacto, de baja inversión económica, de gran tamaño, ya que los tamaños habituales suelen superar los cuatro metros de largo y los dos de alto, con lo que se busca generar impacto sobre quienes los vean en la vía pública.
Una alternativa a estos carteles suelen ser las vitrinas móviles, con similares medidas y posibilidades de movilidad, estas vidrieras pueden exhibir los productos siguiendo diferentes rutas, para garantizar que el cliente pueda conocerlo desde su propio entorno.
Por un lado, al ser más económicas que los paneles y vallas fijas, negocios como restaurantes e inmobiliarias han apostado por ellas.
En cuanto a la efectividad, las móviles –generalmente, montadas sobre camiones en forma piramidal– recorren las calles, paran en lugares predeterminados y entregan volantes publicitarios o de descuentos.
A pesar de que el mercado se ha ido volviendo cada vez más digital, este tipo de aviso todavía tiene espacio para crecer, ya que la gente pasa más tiempo en las calles que en sus casas.
Además, se han comenzado a montar vallas con pantallas LED para ser utilizadas para promocionar películas, obras de teatro, partidos de fútbol, novelas televisivas y recitales.

09 de mayo de 2018 – ep